El impacto es principalmente a la salud, el exceso en la ingesta de alcohol puede aumentar el riesgo de ciertos tipos de cáncer, conducir a enfermedades del hígado, como hígado graso y cirrosis; además de causar daño al cerebro y otros órganos. Beber durante el embarazo puede dañar irreversiblemente al bebé. Además del daño físico, puede llevar a problemas en las relaciones familiares, sociales y causar accidentes.
Si contesta afirmativamente a dos o más de las siguientes preguntas: Durante el último año·
¿Terminó bebiendo más o por más tiempo más de lo que había planeado?· ¿Quiso reducir o dejar de beber, o trató de hacerlo y no pudo?· ¿Pasó mucho tiempo bebiendo, o recuperándose de beber mucho?· ¿Tuvo una fuerte necesidad de beber?· ¿Encontró que beber, o sentirse mal por beber, a menudo interfirió con su vida familiar, trabajo o escuela?· ¿Siguió bebiendo a pesar de que estaba causándole problemas con su familia o amigos?· ¿Dejó o disminuyó actividades que disfrutaba para beber?· ¿Se puso en situaciones peligrosas mientras bebía o después de beber? Algunos ejemplos son conducir borracho y tener relaciones sexuales de alto riesgo· ¿Siguió bebiendo aunque le hiciera sentir deprimido o ansioso? ¿O cuando agravaba otro problema de salud?· ¿Debió beber más y más para sentir los efectos del alcohol?· ¿Tuvo síntomas de abstinencia cuando se le estaba pasando el efecto del alcohol? Los síntomas incluyen problemas para dormir, temblores, irritabilidad, ansiedad, depresión, inquietud, náuseas y sudores. En casos severos, usted podría tener fiebre, convulsiones o alucinaciones.
Consulta a su profesional de la salud para una evaluación.